Cuna Radiante: Técnica de Preparación en la Sala de Partos.

Cuna Radiante

Una de las principales actividades en el servicio de pediatría y tococirugía es el acomodo de la cuna radiante en la sala de parto. Es de gran importancia aprender bien cómo deben estar preparadas y qué materiales necesitarás para que estos pequeños pacientes inicien su vida de la mejor manera posible.

Cuando un neonato llega, su organismo necesita adaptarse al nuevo ambiente al que llega, a lo cual se le llama transición de la vida intrauterina a la extrauterina. Aproximadamente el 90% de los recién nacidos no necesitarán ningún tipo de estímulo durante esta transición para comenzar a respirar de manera espontánea y regular. El 10% restante necesitará un pequeño empujoncito y sólo el 1% de ellos necesitará maniobras más avanzadas. Es por este porcentaje que siempre debemos tener todos los materiales a la mano para brindar una correcta reanimación neonatal básica, o bien una avanzada en caso de que sea necesario.

¿Qué materiales se necesitan en la cuna radiante?

Clasifica los materiales de acuerdo a su función durante la reanimación:

Equipo de succión

  • Pera de goma.
  • Succión mecánica con tubos.
  • Sonda de alimentación 8 Fr y jeringa de 20ml.

Equipo de bolsa y máscara

  • Dispositivo para proporcionar ventilación con presión positiva.
  • Mascarillas faciales para recién nacidos y prematuros.
  • Fuente administradora de oxígeno.
  • Oxímetro de pulso.

Equipo de intubación

  • Laringoscopio de hojas rectas Nº 0 para prematuros y Nº 1 para bebés a término.
  • Cánulas endotraqueales 2.5, 3, 3.5 y 4 mm de diámetro interno.
  • Tijeras.
  • Cinta para fijar la cánula endotraqueal.
  • Mascarilla laríngea.
  • Focos y baterías extras.

Medicamentos

  • Adrenalina 0.1mg/ml en ámpulas de 3 ó 10 ml.
  • Solución salina normal o Ringer Lactato para expansión de volumen, 100 ó 250 ml.
  • Dextrosa al 10% 250ml.
  • Solución salina para enjuagar.

Equipo para cateterizar vaso umbilical

  • Guantes estériles.
  • Tijeras.
  • Antiséptico.
  • Cinta umbilical.
  • Catéteres umbilicales de 3.5 y 5Fr.
  • Llave de 3 vías.
  • Jeringas de 1, 3, 5, 10, 20 y 50 ml.
  • Agujas calibre 25, 21, 18.

Varios

  • Guantes, cubrebocas, gorro quirúrgico.
  • Cuna radiante u otra fuente de calor.
  • Superficie de reanimación firme y acolchonada.
  • Reloj con segundero.
  • Campos o mantas.
  • Onfalotomo.
  • Ligas para cordón umbilical.
  • Estetoscopio.
  • Báscula.
  • Gasas.
  • Pinzas Kelly.

Ya  tengo todo mi material, ¿cómo lo acomodo?

No todo el material se utiliza en todas las reanimaciones, pero es necesario tenerlo preparado, por lo que sólo mencionaremos la preparación de la cuna radiante para una reanimación básica:

  • Identifica en dónde se localizan las baterías, los focos extras y las hojas para el laringoscopio, las cánulas de intubación orotraqueal, las mascarillas faciales, la mascarilla laríngea, las agujas, las jeringas y los medicamentos necesarios para realizar cualquier otro tipo de maniobra avanzada de reanimación.
  • Verifica que el equipo de succión funcione correctamente, que la fuente administradora de oxígeno funcione, cerciórate que el dispositivo de bolsa-válvula-mascarilla se encuentre en buen estado, verifica que la bolsa de reservorio se infle cuando se conecte el dispositivo al tubo de oxígeno, revisa que la luz del laringoscopio funcione adecuadamente.
  • Destapa las ligas para el cordón umbilical, la sonda de alimentación de 8 Fr, la jeringa de 20ml y las gasas, pero no los saques de los empaques ni los toques para no contaminarlos.
  • Lo primero que debes hacer es encender la cuna radiante para precalentarla; recuerda que una de las principales metas de la reanimación es evitar la pérdida de calor.
  • Calibra en la báscula un campo y colócalo junto con otro a los lados de la cuna radiante de manera que no interfieran cuando se coloque al bebé y que puedas desenvolver cuando se requiera; el campo calibrado será el último que abrirás para que al pesar al bebé tenga el peso correcto.
  • Realiza tu aseo quirúrgico de manos y, una vez abierto el bulto quirúrgico, solicita el onfalotomo, las tijeras y las pinzas necesarias.
  • ¡Prepárate para recibir al neonato!

Es importante recalcar que cada centro hospitalario tiene sus propias formas de acomodar las cunas térmicas, sin mencionar que no todas cuentan con todos los materiales mencionados,  por lo que los pasos aquí mencionados son sólo una guía base de cómo debe prepararse la cuna térmica.

Referencias Bibliográficas

American Academy of Pediatrics (2011). Reanimación neonatal texto 6ta edición. EE.UU.: AHA.

Clara Aurora Zamorano Jiménez, G. C. (2012). Control térmico en el recién nacido pretérmino. Perinatología y Reproducción Humana , 43-50.

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